Vicky dice

Mi foto
Estudiante de Imagen y Sonido, que sería una forma distinta de decir Cine. Cineasta en formación. Crítica de cine (entre amigos). Lectora. Que disfruta de la música. Gustos varios. Joven promesa (o intento de). Piba de barrio. Que disfruta de la compañía de amigos. Con proyectos que incluyen muchos kilómetros por recorrer.

jueves, junio 17, 2010

Sueño que te viene, sueño que te va


Siempre tuve sueños muy particulares. Desde chica, que soñé mas de una vez que tenia un gorila colgado de la ventana de la habitación de mis viejos y que en la pared del comedor aparecían unas escaleras que me llevaban a una especie de.. Bodega? Algo así.
A veces tengo sueños simples, que no tienen ninguna historia que salga de lo común. Hace poco soñé que me comía a un amigo (comer literalmente) como un caníbal que se alimenta de carne humana.
El sueño más extraño que recuerdo haber tenido es uno que tuve de hace un par de años, todavía me quedaba un año para terminar el colegio:
Estaba yo caminando con dos o tres personas mas en una especie de cementerio Inca.. íbamos vestidos cuales arqueólogos. En un momento del recorrido nos encontramos con una pared que nos cerraba el paso, la cual estaba llena de dibujos y frases en idiomas que no conocía (algo similar a La Cueva de las Manos) Y de golpe esa pared empezó a temblar, a temblar y mucho, tanto que terminó tumbándose. Del otro lado del muro descubrimos una isla, una isla con palmeras y un atardecer increíble. La cueva salía al corazón de la isla. Ésta estaba como protegida, porque sus orillas no daban directamente al mar sino que estaba bordeada por montañas, menos en una parte que tenía como un lago con salida al mar (sé que esto tiene un término específico que lo define, pero en este momento no me lo acuerdo) Tanto mis compañeros como yo estábamos maravillados con la hermosura del lugar. Caminábamos por la arena blanca, jugábamos, trepábamos las palmeras cuales monos para bajar cocos y tomar agua. Pero en un momento, el agua del lago empezó a moverse.. cada vez más y más. Los que se habían metido al agua salían corriendo por temor a que el agua los tapase y ahogase. El temblor era tan fuerte que comenzaron a armarse olas, pequeñas, pero olas al fin. Y de repente, sin que nadie pudiera imaginárselo, salió como una especie de calamar gigante y nos empezó a observar. Claramente todos nos asustamos y corrimos despavoridos hasta el lugar más cercano que pudiera servirnos de refugio. El calamar se quedó mirando y se hundió de nuevo. Recién empezaba a calmarme un poco, cuando otra vez comenzaron los temblores, solo que esta vez no temblaba el agua sino toda la isla. Estos temblores eran mucho mas fuertes que los anteriores. Los pájaros volaban asustados hacia el mar, intentando escapar. Muchas piedras caían desde lo alto de las montañas, también caían cocos o frutas de las copas de los árboles. En este momento del sueño, la “cámara” empieza a alejarse. Me veía a mi misma y a mis compañeros como íbamos achicándonos debido a la distancia, y así pude ver como debajo de la isla habían salido unas patas como de un cangrejo. La isla era el caparazón de este cangrejo, que lo que hizo fue nadar y nadar, alejándose, o sea que la isla-caparazón-de-cangrejo se estaba moviendo. Y el cangrejo gigante se fue alejando y alejando, hacia el horizonte donde el sol se estaba poniendo.
Me desperté y decidí que cuando fuera cineasta, haría una película con esta historia.

1 comentario:

  1. Jajaja, ya existe me parece vicky.
    igual estan buenos los sueños raros...de esos que no te queres despertar de tan bizarros

    ResponderEliminar